Invertir en una franquicia es una gran alternativa, tanto para inversionistas como para personas que buscan asegurar un negocio rentable a futuro, pero hay aspectos importantes que debemos tomar en cuenta para que nuestra inversión tenga los resultados esperados.
Se deben analizar diferentes situaciones antes de adquirir una franquicia; debemos ver los puntos a favor y en contra que tiene invertir en una marca y ver si se adapta a lo que buscas. Es algo que no debemos tomarnos a la ligera, ya que al final de cuentas se trata de nuestro futuro y estabilidad financiera. Por ello, traemos para ti una serie de aspectos que debes tomar en cuenta antes de invertir en una franquicia, para que tengas el éxito que tanto estás esperando.
Elegir qué modelo de negocio estamos buscando, existen dos tipos:
- Modelo inversor: en este se requiere una inversión más elevada, pero como consecuencia de esto, vamos a tener una mayor rentabilidad. Nos da la facilidad de involucrarnos menos en el negocio y aún así generar utilidades.
- Modelo autoempleo: para este no se requiere una inversión tan elevada, pero implica que también será menor nuestra rentabilidad. Igualmente, esta opción te permitirá estar en el día a día de lo que suceda en el negocio.
Analizar el monto que estamos dispuestos a invertir: el inversor debe definir bien el capital con el que cuenta; es decir, cuánto está dispuesto a invertir y también cuánto quiere ganar a corto y largo plazo. También debemos identificar si queremos una empresa consolidada o una que esté en desarrollo, estás son las principales diferencias:
- En una empresa consolidada el riesgo es menor, ya que es una marca establecida con años de experiencia, pero también tiene desventajas, una de ellas es que la inversión será aún mayor y debes contar con un capital importante para poder ofertar en una franquicia de este estilo. También hay que tomar en cuenta que al ser empresas ya establecidas y conocidas la capacidad de crecimiento es muy poca.
- Después tenemos las empresas en desarrollo, en estas tendremos mayor riesgo porque apenas están alcanzando el punto deseado del éxito. Esto implica que también la inversión sea menor y gracias a que es una empresa que todavía sigue en desarrollo, podrás aportar ideas para que funcione de mejor manera. Además, hay mayor oportunidad de crecimiento tanto para el franquiciado como para la franquicia.
Análisis de la franquicia: es un estudio previo en donde vamos a indagar más a profundidad la franquicia; por ejemplo, investigar cuáles son las actividades principales, su tipo de cliente, cuál es el diferenciador de la marca, la imagen y reputación, de qué manera generan ingresos… entre otros aspectos que tenemos que tomar en cuenta sobre el manejo de la empresa. Esto nos asegura si es lo que buscamos en un negocio o debemos buscar otra opción que se apegue más a nuestro perfil.
Estudio económico: es indispensable solicitarle a la marca una investigación económica con un informe completo sobre la inversión inicial, un estimado de pérdidas y ganancias y cuántos clientes se esperan por día y por mes. Así podremos medir la viabilidad que tiene invertir en la franquicia.
Información contractual: básicamente son todos los aspectos legales alrededor de la compañía. Estos deben de ser revisados previamente por un experto legal por si existe alguna laguna dentro del documento.
Es importante que tengamos un análisis detallado de la franquicia en la que vamos a invertir, ya que como inversor es relevante que analices todas las posibilidades de franquicias que hay en el mercado, para que en base al análisis de diferentes marcas puedas tomar una decisión de cuál es la que más se adapta a tus especificaciones y objetivos.